Hoy hablaba con una de mis mejores amigas (S) por teléfono y me di cuenta de algo de lo que no estaba conciente hasta el momento: una de las mejores decisiones que pude haber tomado fue la de haber renunciado a mi trabajo!, en verdad, viendo retrospectivamente no era un trabajo que me diera muchas satisfacciones o incluso que aportara algo nuevo, innovador o interesante a mi curriculum, ya ni se diga a mi vida profesional. Si, deje a muy buenos amigos a los que quiero en verdad pero si uno no piensa en uno mismo pues quien lo va a hacer ¿no?
Ahora que se todo esto me siento feliz por haberlo hecho, no cabe duda que a veces necesitamos de algún tiempo para que nos caiga el veinte sobre algunas cosas.
Ya es miércoles, falta menos para el fin!
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